Lejos del ruido y la mala fama que le dan, la ciudad de Pedro Juan
Caballero guarda tesoros naturales únicos en el país. Bosques vírgenes,
saltos de agua escondidos y cerros con la maravillosa vista de la
cordillera del Amambay son opciones excelentes para disfrutar del tiempo
libre haciendo turismo interno.
El imponente salto Y'ambue, un lugar imperdible para quienes buscan una auténtica aventura. / Gustavo Báez, ABC Color
/ Gustavo Báez, ABC Color
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El
balneario Samu'u Ñu es un emprendimiento familiar que desde 1992 está
en constante crecimiento. Uno de los propietarios, Luis Fernando Buffa,
se encarga personalmente de cada detalle para el máximo disfrute del
establecimiento. / Gustavo Báez, ABC Color
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El
complejo Chacurrú Ecoturismo cuenta con tres cascadas, cerros, bosques
vírgenes y pasillos de piedras, ideales para el senderismo, en un
ambiente seguro y con el acompañamiento constante de los propios dueños.
/ Gustavo Báez, ABC Color
Llegar
a Pedro Juan Caballero, capital del departamento de Amambay, 536 km al
norte de Asunción, no es como cualquier consumidor de noticias
policiales se puede imaginar. Uno se encuentra con una población amable y
hospitalaria, paraguayos que denotan su esfuerzo diario por el
desarrollo de su comunidad.
En los centros comerciales de primer
nivel, se pueden encontrar artículos de las mejores marcas y a precios
accesibles. Por ser un punto fronterizo (con Brasil), el flujo de
turistas es intenso durante todo el año. Los servicios de hotelería y
hospedaje son bastante accesibles. Pero sus mayores atractivos no están
en sus concurridas calles, sino unos kilómetros más alejados, donde la
naturaleza regala sus prodigiosas bellezas en plena cordillera del
Amambay.
En la zona conocida como “la terraza del país”, la altura
máxima puede superar los 600 m sobre el nivel del mar. Su vegetación es
extensa y, por las características del terreno, cuenta con numerosos
saltos de agua, que en su mayoría no son muy conocidos, porque la
“industria sin chimenea” recién ahora empieza a considerarse como un
negocio rentable.
Y’ambue: aventura para privilegiados
Para
los más aventureros, Pedro Juan Caballero tiene una opción ideal: el
salto Y’ambue, un privilegiado establecimiento asentado en una propiedad
privada de 20 ha. Para llegar, se deben recorrer 20 km de un camino de
tierra lleno de vegetación, que casi interrumpe el paso por la escasa
circulación, por lo que es recomendable visitarlo en automóviles 4x4.
Poco después de ingresar a la propiedad está el arroyo San Juan, que se
oye desde no tan lejos. Luego, se debe caminar al costado del cauce unos
300 m de bosque virgen, disfrutando al máximo del sonido de la
naturaleza, entre árboles añosos y el correr del agua. Ideal para
safaris fotográficos.
Así se llega a un precipicio de 50 m, con
una hermosa vista de la cordillera del Amambay. Pero lo más maravilloso
está a la derecha, donde pareciera que se acaba el cauce, pero en
realidad nace la caída del agua de 47 m. Al acercarse a la orilla, se
pueden ver diminutas piedras al fondo.
Para disfrutar de este
espectáculo de frente, se debe cruzar a pie el arroyo e iniciar la gran
aventura de descenso: se trata de unos 600 m más de bajada, abriendo
caminos en varios puntos; otros sectores son pedregosos y empinados,
mientras que en ciertos “huecos” se puede disfrutar de la hermosa vista:
campos abiertos con una extensa vegetación.
El sonido del agua que cae se percibe desde muy lejos. La cascada es tan fuerte como hermosa; una verdadera maravilla.
El
guía turístico Arsenio Aguirre comenta que anteriormente organizaban
excursiones en el lugar; los descensos se hacían con rapel, pero por la
falta de apoyo estatal y de difusión están aguardando la oportunidad de
reactivar este servicio.
Chacurrú
Hace un
año y tres meses, se habilitó el primer complejo turístico a gran escala
en la zona. En aquel entonces, se llamó Chakurrai, pero por motivos
legales de nomenclatura, hoy, se denomina Chacurrú. En este corto
tiempo, se recibió en el lugar a más de 3500 turistas, que pudieron
realizar el Canopy Tour, el circuito turístico de aventura extrema único
en la región.
El lugar está ubicado a 15 km del centro urbano,
con caminos de todo tiempo y alojamiento para 60 personas. De las 25 ha
que tiene este parque, 15 de ellas son de bosques nativos; existe un
amplio lugar para acampar, arroyos y piscinas naturales.
El Canopy
Tour está dividido en cuatro etapas, que incluyen actividades como
arborismo con seis puentes colgantes de hasta 30 m de altura,
senderismo, la tirolesa más larga del país con unos 140 m de distancia y
40 m de altura, y rapel al costado del salto San Juan, de casi 30 m de
altura.
El costo del recorrido es de G. 130.000 por persona, con los que se puede pasar todo el día en el establecimiento.
El
propietario, David González, comenta que desde los primeros meses de
apertura reciben a turistas desde distintos puntos del país como
Asunción, Ciudad del Este e incluso de varios lugares del Chaco. Resaltó
que desde el lado brasileño el flujo de visitantes va en franco
aumento. “Estamos logrando echar por tierra el ‘cuco’ que siempre
caracterizó a esta ciudad. Hoy en día, los visitantes que llegan se dan
cuenta de que Pedro Juan Caballero no es como sale en las noticias, que
hay gente buena, trabajadora y con deseos de progresar, por eso junto a
mi familia decidimos apostar a este emprendimiento, del que cada vez
estamos más orgullosos”, expresa.
Según Ruth González, hija menor
de don David y coordinadora del Canopy Tour, la clave es el trato que se
da a los visitantes. “A quienes llegan, nosotros les tratamos como en
su casa. Somos todos una gran familia. Incluso, cuando algunos no se
animan a realizar el circuito hacemos un poco de sicólogos y, al
terminar, nos agradecen porque les ayudamos a superar sus miedos”,
comenta.
Samu’u Ñu
Para las familias que
dispongan de poco tiempo y busquen disfrutar más tranquilos de un lugar
bello y con todas las comodidades, está el balneario Samu’u Ñu. La
propiedad pertenece a Luis Fernando Buffa, quien se encarga
personalmente del mantenimiento y mejoras del establecimiento. El local
cuenta actualmente con tres piletas y una cuarta, que tendrá un tobogán
gigante, está en construcción.
Buffa comenta que el balneario se
creó casi sin intención, pues construyó una pileta familiar y, como cada
vez los vecinos que llegaban eran más, decidió construir una piscina
más y cobrar por su uso. De a poco fue mejorando el lugar: construyó una
pileta más para los niños y consiguió la habilitación en todas las
instancias correspondientes para explotar turísticamente el lugar.
Las
dos piscinas más nuevas son alimentadas con agua de una naciente que
hay en la propiedad, que se renueva semanalmente mediante un sistema
ideado por Buffa.
Otra característica es la decoración, que consta
de numerosos elementos y herramientas de hierro y otros metales, que
eran utilizados por la familia.
Sepa más
Chacurrú
www.facebook.com/chacurru
Teléfono (0983) 776-060
Turismo de aventura
Arsenio Aguirre
Teléfono (0971) 804-946
mbareiro@abc.com.py
Fuente: Abc color
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